La acumulación de datos no es suficiente
La administración y el control, así como la gestión de los datos en la empresa, es ya un arma estratégica para mejorar el rendimiento de las compañías.
Conseguirlo supone tener una mayor compresión y entendimiento del entorno y los procesos gracias al Business Intelligence. El mismo, constituye un verdadero eje integrador de la información de las compañías al producir;: reducción de costes, generación de ingresos, mejora de la productividad, un mayor control de riesgos y favoreciendo también la innovación.
El uso de BI tanto para directores, gerentes y responsables de departamento es fundamental en la toma de decisiones; y el acceso de la información crítica de negocio al objeto de tener una visión de lo más completa de la marcha de la compañía ¿Pero cuáles son las áreas en las que funciona mejor?
La Inteligencia de Negocio supone la captura, acceso, comprensión y conversión de los activos más valiosos de una empresa como son los datos en información accionable con el objeto de mejorar el desempeño.
La simple acumulación de datos no es suficiente, hoy es fundamental conocer, clasificar, filtrar y utilizar toda la información clave; mediante un análisis exhaustivo de la información para que ésta se convierta en un verdadero activo generador de negocio en la empresa.