Gobernanza digital
Se estima que el tráfico global del protocolo de internet (IP) se triplicará con creces en 2022 con respecto a 2017; y con el creciente número de dispositivos móviles y dispositivos conectados a internet; se espera que el tráfico de datos por banda ancha móvil represente casi un tercio del volumen total de datos en 2026.
Los países deben romper con los silos y comenzar a moverse hacia un enfoque global más holístico y coordinado, para lo cual la gobernanza digital y de los datos es clave. Los datos digitales juegan un papel cada vez más importante como recurso económico y estratégico, algo que se consolidó tras la pandemia del Covid-19 donde compartir datos de salud a nivel mundial para ayudar a los países a enfrentar sus consecuencias y con fines de investigación para encontrar vacunas ha sido vital.
Actualmente, la gobernanza de datos se ejerce principalmente con tres enfoques divergentes de parte de Estados Unidos, China y la Unión Europea. El enfoque estadounidense se centra en el control de los datos por parte del sector privado; el modelo chino enfatiza el control de los datos por parte del gobierno, mientras que la UE favorece el control de los datos por parte de las personas, en base a derechos y valores fundamentales.
El conocimiento y los datos no tienen fronteras y fluyen de un lado a otro con alta velocidad, por lo que establecer un sistema de gobernanza de datos global permitiría a los países aprovechar mejor los datos como un bien público mundial.